1. Planteamiento.
Como sabréis de buena tinta, los movimientos en defensa de la educación pública han confluido en una plataforma, como resultado de una convocatoria hace apenas dos meses: “Redes para una nueva política educativa”.
La comunidad educativa andaluza está viviendo su propio proceso de confluencia y entendimiento sobre las mismas bases, que se dirige al “Encuentro Andaluz por la Educación Pública”, el día 18 de marzo.
Pues bien, una de las dimensiones, para nosotros principal, del movimiento por la educación pública, consiste en promover la innovación al servicio del alumnado. De ahí que las Redes nos inviten a reflexionar sobre ese aspecto concreto, todavía más en una época y un escenario mediático donde lo público está siendo cuestionado por una supuesta falta de disposición para innovar, en beneficio de la enseñanza privada y concertada.
¿Podemos formar un equipo que abra y extienda el debate al entorno de los docentes innovadores? De esa manera, no seremos vistos como seres extraordinarios, desconectados de la realidad mayoritaria por circunstancias excepcionales; e incluso como privilegiados por la suerte o por la administración educativa.
Me temo que no hay nada más lejos de la realidad cotidiana en las aulas que ese hipotético privilegio.
Learn from Failure in Design Thinking: https://vimeo.com/channels/1041228/69977212 |
2. Conexión EABE.
El EABE tiene, por supuesto, su propia dinámica y unos objetivos flexibles, que se adaptan a la actualidad desde hace una década. Gracias a su flexibilidad y a la buena voluntad de sus organizadores en Almería, el EABE17 va a acoger una tertulia que sirva para conectar a la “vanguardia” de la innovación con las demandas y las necesidades de la comunidad educativa andaluza.
Este podría ser el título:
“Polvo, pólvora y paja en la innovación educativa”
¿Qué parte del amplísimo catálogo de las innovaciones educativas debería convertirse en reglamento de organización escolar o en una ley andaluza sobre innovación para la inclusión?
No se trata de excluir a nadie del territorio educativo, sino de discernir en común aquellos elementos: métodos o procedimientos que se han experimentado en las aulas y han probado su validez general, más allá del marco de las “buenas prácticas” encomiables. Todas las innovaciones son legales, salvo que fueran inmorales, que no suele ser el caso. Sin embargo, los aquí participantes asumimos el reto de reflexionar sobre cuáles serían las prácticas que deberían convertirse en ley educativa o, al menos, en un reglamento sobre la organización escolar que garantice y facilite la innovación.
3. Por qué debería facilitarse la innovación: criterios para una nueva o renovada normativa.
1) Hace posible el éxito de todo el alumnado, sin exclusiones.
2) Facilita la atención a la diversidad y, especialmente, de la diversidad funcional.
3) Permite compensar las desigualdades sociales y asegurar la igualdad de oportunidades.
4) Promueve la inclusión de todo el alumnado en un grupo-aula, en vez de crear grupos segregados.
5) Favorece el seguimiento personalizado de los aprendizajes.
6) Crea un marco pedagógico adecuado para la participación del alumnado como gestor intencional de su propio aprendizaje, de modo personal y cooperativo.
7) Pone en relación el proceso de enseñanza formalizado con las especies de aprendizaje informal, invisible o emergente que se canalizan a través de los medios sociales o en las culturas juveniles y populares, de modo que puedan llenarse los vacíos en el desarrollo de la capacidad comunicativa del alumnado: prácticas en géneros discursivos complejos, alfabetizaciones múltiples.
8) Trasciende los límites de las disciplinas académicas o científicas, con el propósito logrado y probado de desarrollar integralmente las competencias del alumnado para la vida en contextos sociales relevantes.
9) Previene la intervención de distintos agentes sociales en la ciudad educadora, de acuerdo con el principio de que todo el pueblo tiene que educar a cada niña o niño, como una analogía de los ritos de iniciación en una sociedad laica, abierta y plural.
10) Plantea problemas, retos o desafíos reales que interesan a todo el alumnado, potencialmente, o a la mayoría de ellas y ellos, provocando experiencias memorables y un aprendizaje auténtico durante el proceso de resolverlos.
11) Tiene en cuenta las necesidades formativas de las familias, en razón de sus prácticas culturales, sociales o étnicas, así como su situación socioeconómica, de manera que puedan intervenir de modo crucial en la educación de sus hijas e hijos durante el periodo de escolarización obligatoria y a lo largo de la vida.
12) Construye comunidades de aprendizaje, práctica e investigación donde crear conocimiento compartido por medios democráticos, en vez de limitarse a transmitirlo por medios jerárquicos y estratificadores, que reproduzcan las injusticias sociales.
Hay otros criterios posibles: apórtalos a través de tus comentarios.
Es posible corregir o criticar estos aquí presupuestos. Hazlo de la mejor manera.
Proyecto Cártama: IES Cartima. |
4. Metodologías que cumplen los criterios de estandarización: cómo y en qué medida.
Rogamos que añadas, en forma de comentarios a esta entrada, aquellas metodologías o propuestas didácticas, de acuerdo con vuestra experiencia, que puedan cumplir todos o la mayoría de estos criterios.
Puedes o, quizá, deberías, hacer evidente la mayor o menor relevancia de los criterios citados en tales modelos.
Si deseas intervenir en la gestación a través de un equipo permanente, usa este enlace de acceso al documento y a la carpeta de Google Drive donde se está preparando la tertulia en el EABE17.
BTOY en IES Cartima. Proyecto ABP. |
5. Condiciones organizativas y curriculares para el cambio metodológico a favor de la inclusión.
¿Era suficiente añadir a la LOMCE una orden específica acerca del desarrollo de las competencias y, dentro de ella, un anexo sobre metodologías (Orden ECD/65/2015? Parece que muchos docentes innovadores hemos usado esa herramienta normativa como escudo en la argumentación a favor del uso de proyectos y de portafolios en sus programaciones.
Sin embargo, la estructura de los centros no ha variado significativamente: no se ha promovido el trabajo en equipos educativos, no se han reorganizado los espacios ni los horarios escolares, no se han transformado los proyectos educativos de centro, salvo excepciones heroicas que, en realidad, no estaban previstas por la citada normativa.
Rodrigo Juan García ha participado en el debate abierto a través de las redes sociales, proponiendo lo siguiente:
"1.- Coincido con el propósito de apuntar ejes sobre un futuro acuerdo de bases para la elaboración participada de una norma que facilite y promueva las condiciones organizativas necesarias para el desarrollo de una práctica educativa inclusivamente innovadora.
Podría ser razonable que con el debate se pudiera esbozar algunos ejes para una ley andaluza, decreto de gobierno…, sobre ‘Innovación educativa e inclusión’, y superar los viejos planteamientos burocráticos y gerencialistas de los tradicionales Reglamentos Orgánicos de Centro (ROC).
Con este cometido ya tendríamos bastante contenido para este debate reflexivo.
2.- En línea con el argumento anterior, no sé si la materia de trabajo debería ser la ‘validación’, según criterios de inclusión y participación, de distintos formatos metodológicos, procedimientos de relación con el conocimiento… etc.
La fórmula de otorgar el marchamo de ‘buena metodología’ a una u otra propuesta me temo que no aseguraría el propósito del debate. Ninguna norma legal debería pronunciarse por uno u otro formato metodológico y, sin embargo, si debería fijar el marco y los requisitos básicos de una buena enseñanza.
3.- Planteo la conveniencia de centrar el debate en la formulación de algunas de las condiciones organizativas (yo ampliaría, también curriculares) que faciliten, promuevan y aseguren el desarrollo de un conjunto de alternativas metodológicas, de las que Joaquín ya nos ofrece un amplio listado en este documento.
Al hablar de condiciones organizativas me estoy refiriendo a aspectos como…
a.- Admisión del alumnado.
b.- Ratios y distribución equilibrada de las necesidades educativas entre centros, dentro de cada centro y en el aula (ratios para la buena atención a la diversidad).
c.- Participación de la Comunidad educativa en los procesos de admisión, en los proyectos educativos y su evaluación, en los reglamentos de funcionamiento y el seguimiento de los aprendizajes
d.- Plantillas de los centros, dotación del profesorado, perfiles, profesorado de apoyo, actividades complementarias, sustituciones, formación continua, roles directivos…
e.- Funciones de los órganos directivos, nombramientos, liderazgo pedagógico y de innovación…
f.- Relevancia de las estructuras de coordinación docente en tareas de reflexión sobre la práctica, evaluación y planificación y desarrollo docente…
g.- Establecimiento y desarrollo de redes de escenarios educativos y construcción de proyectos educativos de barrio, ciudad…
h.- ….
En cuanto a las condiciones curriculares …
a.- Principios curriculares básicos planificación y desarrollo…
b.- Estrategias de planificación colectiva y de evaluación de propuestas curriculares…
c.- Principios metodológicos en la acción (espacios multiusos, periodos amplios de tiempo, trabajo interdisciplinar, aprendizaje en el entorno…)
d.- El desarrollo curricular (la observación entre pares, análisis colectivos de grabaciones de prácticas…)".
Sin embargo, la estructura de los centros no ha variado significativamente: no se ha promovido el trabajo en equipos educativos, no se han reorganizado los espacios ni los horarios escolares, no se han transformado los proyectos educativos de centro, salvo excepciones heroicas que, en realidad, no estaban previstas por la citada normativa.
Rodrigo Juan García ha participado en el debate abierto a través de las redes sociales, proponiendo lo siguiente:
"1.- Coincido con el propósito de apuntar ejes sobre un futuro acuerdo de bases para la elaboración participada de una norma que facilite y promueva las condiciones organizativas necesarias para el desarrollo de una práctica educativa inclusivamente innovadora.
Podría ser razonable que con el debate se pudiera esbozar algunos ejes para una ley andaluza, decreto de gobierno…, sobre ‘Innovación educativa e inclusión’, y superar los viejos planteamientos burocráticos y gerencialistas de los tradicionales Reglamentos Orgánicos de Centro (ROC).
Con este cometido ya tendríamos bastante contenido para este debate reflexivo.
2.- En línea con el argumento anterior, no sé si la materia de trabajo debería ser la ‘validación’, según criterios de inclusión y participación, de distintos formatos metodológicos, procedimientos de relación con el conocimiento… etc.
La fórmula de otorgar el marchamo de ‘buena metodología’ a una u otra propuesta me temo que no aseguraría el propósito del debate. Ninguna norma legal debería pronunciarse por uno u otro formato metodológico y, sin embargo, si debería fijar el marco y los requisitos básicos de una buena enseñanza.
3.- Planteo la conveniencia de centrar el debate en la formulación de algunas de las condiciones organizativas (yo ampliaría, también curriculares) que faciliten, promuevan y aseguren el desarrollo de un conjunto de alternativas metodológicas, de las que Joaquín ya nos ofrece un amplio listado en este documento.
Al hablar de condiciones organizativas me estoy refiriendo a aspectos como…
a.- Admisión del alumnado.
b.- Ratios y distribución equilibrada de las necesidades educativas entre centros, dentro de cada centro y en el aula (ratios para la buena atención a la diversidad).
c.- Participación de la Comunidad educativa en los procesos de admisión, en los proyectos educativos y su evaluación, en los reglamentos de funcionamiento y el seguimiento de los aprendizajes
d.- Plantillas de los centros, dotación del profesorado, perfiles, profesorado de apoyo, actividades complementarias, sustituciones, formación continua, roles directivos…
e.- Funciones de los órganos directivos, nombramientos, liderazgo pedagógico y de innovación…
f.- Relevancia de las estructuras de coordinación docente en tareas de reflexión sobre la práctica, evaluación y planificación y desarrollo docente…
g.- Establecimiento y desarrollo de redes de escenarios educativos y construcción de proyectos educativos de barrio, ciudad…
h.- ….
En cuanto a las condiciones curriculares …
a.- Principios curriculares básicos planificación y desarrollo…
b.- Estrategias de planificación colectiva y de evaluación de propuestas curriculares…
c.- Principios metodológicos en la acción (espacios multiusos, periodos amplios de tiempo, trabajo interdisciplinar, aprendizaje en el entorno…)
d.- El desarrollo curricular (la observación entre pares, análisis colectivos de grabaciones de prácticas…)".
6. ¿De qué sirven el discernimiento, la argumentación y la inteligencia colectiva, si las leyes se elaboran sobre una lógica autonomizada con respecto a la práctica y a las necesidades de la comunidad educativa?
Para evitar que eso ocurra, una vez demostrada la escasa eficacia de una especie de ingeniería institucional desde arriba, nuestras reflexiones se insertan en una corriente viva de construcción social desde abajo y por parte de muchos agentes: multilateral y, cuanto más democrática, más corresponsable y eficaz. En nuestro entorno hablamos de las "Redes por una nueva política educativa", del "Movimiento andaluz por la educación pública", pero también del EABE.
No nos sirven los medios burocráticos, ni tampoco las profecías autocumplidas de las grandes corporaciones tecnológicas, en la medida que pueden provocar aburrimiento o entretenimiento, pero no garantizar la inclusión ni adaptarse a los procesos de aprendizaje histórico, situados en el tiempo: p.ej. el pasado, el presente y el futuro del cambio climático, la desigualdad económica, la violencia de género, la interculturalidad, etc.
A Saxon School with the schoolmaster in the year around 1911: https://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:A_Saxon_school_around_1910.jpg |
Aprovecho para invitaros a leer el sustancioso artículo de nuestro compañero y amigo Nacho Gallardo en este mismo blog: ¿Por qué la Administración descuida la innovación y la mejora educativa?